Qué es?
Enfermedad inflamatoria crónica resultado de una predisposición genética (de familia) que se relaciona con alteraciones en la composición y función de ka piel, sumando a otros factores del medio ambiente.
Se inicia en cualquier momento de la pero la edad más frecuente es entre los 3 meses y 2 años de edad. Una vez se adquiere, puede persistir por unos años o por tiempos muy prolongados dependiendo de la edad de inicio, de la severidad y de antecedentes relacionados con otras enfermedades como el asma y la rinitis.
Causas:
+ Factor inmunológico.
+ Alteración de barrera cutánea, lo que conduce a deshidratación, sequedad y penetración de sustancias nocivas que inducen a inflamación.
+ Predisposición a infecciones bacterianas y virales.
+ Factor genético, aproximadamente el 50% de los pacientes con dermatitis atópica tienen un familiar en primer grado con la misma enfermedad y un 28% con atópia respiratoria. Cuando ambos padres tienen la enfermedad el 80% de sus hijos la desarrollan, siendo más importante el antecedente en la madre.
Clínica:
La morfología y distribución varia con la edad: en los primeros 2 años las lesiones se localizan principalmente en mejillas y cuello, posteriormente en áreas extensoras de brazos y piernas, en preescolares y escolares las lesiones se localizan en pliegues de codo y rodillas. Las lesiones se exacerban con el sudor.
Consejos para controlar la enfermedad:
+ Es importante que los baños sean cortos, con agua tibia, evitando las toallas y los estropajos.
+ Procura utilizar jabón neutro o un limpiador de piel recomendado por un especialista.
+ Aplica crema humectante después del baño con la piel húmeda y varias veces al día.
+ Evita al máximo el uso de perfumes o colonias y ropa de lana.
+ Aplica protector solar con factor de protección SPF>30. Recuerda hacerlo en áreas que se expondrán al sol, preferiblemente en la mañana y al medio día.
+ Procura no utilizar cloro, suavizantes o antibacteriales para la ropa. Los jabones suaves son apropiados. Por ejemplo el jabón de coco para el lavado.
+ La mejor opción siempre será utilizar ropa de algodón.
+ Ten en cuenta que mantener cortas las uñas de los niños evitará traumas en la piel.
+ Al salir de la piscina, siempre debes bañarte para retirar el cloro, termina aplicando crema para hidratar la piel.
+ Evita al máximo el contacto con partículas como polvo, caspa de animales, jabones irritantes o químicos volantes.